Signos y síntomas típicos
Los TNE son frecuentemente muy pequeños y crecen lentamente. Pueden aparecer casi en cualquier parte del cuerpo y, dependiendo de dónde se encuentren, pueden producir una variedad de síntomas o, en algunos casos, ningún signo o síntoma.
Algunas veces, los síntomas pueden ser imprecisos (como la fatiga) o incluso parecerse a otras afecciones. Por ejemplo, los TNE que ocurren en el tracto digestivo pueden causar náuseas, vómito, diarrea o pérdida de peso, todos los cuales se observan en otros trastornos digestivos diversos. Esto puede hacer que el diagnóstico de los TNE sea muy desafiante.
Algunos TNE liberan hormonas. Estos se llaman “TNE funcionales”. Los síntomas de los TNE funcionales dependen de las hormonas específicas que se producen excesivamente. Si un TNE
no produce hormonas extra, se llama “no funcional”. Esto no significa que ese TNE no produzca síntomas. Algunas veces, el tamaño y la ubicación del TNE puede causar síntomas, incluso si es no funcional.
Los síntomas anteriores solo representan algunas de las quejas más comunes. Así como todas las personas son diferentes, cada paciente con TNE tiene una experiencia diferente.