Cuidarse mientras cuida a alguien con un diagnóstico de NET
¿Qué puedo hacer para fomentar mi propio bienestar?
Cuidar a un ser querido con TNE puede ser complejo y exigente, y puede requerir mucho tiempo, mucha energía y muchos recursos.1 Muchas personas acaban agotadas y superadas al intentar combinar sus responsabilidades como cuidadores con su propia vida cotidiana y laboral. Posiblemente se centran tanto en las necesidades de las personas a las que cuidan que se olvidan de sus propias necesidades y dejan de prestar atención a molestias como el estrés, la enfermedad, la falta de sueño, la ira o la depresión.2 Hay estudios que han demostrado que a menudo los cuidadores comunican mayores dificultades sobre su bienestar mental y emocional y sobre su salud física que los no cuidadores.3
Por lo tanto, cuando cuida a otra persona, también es importante cuidarse. Cuando goza de un buen estado de salud, es más fácil ofrecer un mejor apoyo a la persona a la que cuida.
Estos son algunos consejos para fomentar su propio bienestar:
Dedíquese tiempo, descanse lo suficiente y haga pausas frecuentes, aunque solo sean algunos minutos cada día.
Dedique tiempo a sus propias aficiones y actividades sociales, como visitar a otras personas, montar en bicicleta, leer un libro, salir de paseo o hacer algo con lo que disfrute.
No olvide sus propias necesidades, como comer y dormir lo suficiente.
No olvide su propia salud y mantenga el ritmo de sus visitas al médico y de su medicación.
Reconozca el mérito de los esfuerzos que está haciendo: al proporcionar estos cuidados, está marcando una gran diferencia y está haciendo todo lo que puede.
Hablar con alguien que está en una situación parecida y que comprende por lo que está pasando le puede aliviar bastante.
Si siente agotamiento, estrés, depresión o tiene problemas para dormir, es importante que preste atención a estos síntomas y que consiga ayuda profesional si hace falta.